FARMACEUTICAS YA REPARTIERON MAS DE 20 MIL MILLONES DE DOLARES EN DIVIDENDOS CUANDO APENAS VACUNARON A UN DIEZ POR CIENTO POBLACION MUNDIAL

Las grandes multinacionales farmacéuticas fabricantes de vacunas COVID han pagado 21.610 millones de dólares de dividendos a sus accionistas, dinero equivalente a 1.300 millones de dosis de sus vacunas. La Alianza People's Vaccine, una coalición de organizaciones que incluye a Oxfam, Salud por Derecho, Yunus Center, Frontline AIDS, ONUSIDA y Global Justice Now, entre otras, difundió que Pfizer, Janssen y AstraZeneca han pagado 21.610 millones de euros entre dividendos y recompras de acciones a sus accionistas en los últimos 12 meses.
“Una cifra que paga la vacunación de, al menos, 1.300 millones de personas, el equivalente a la población de África y cuyo coste de dosis por persona sería de 16,6 euros”, comparó la Alianza. La rentabilidad impúdica de las multinacionales cuando escasean las dosis e incluso se incumplen los contratos como ocurrió con AstraZeneca en Argentina, ha originado protestas a las puertas de las reuniones de las juntas de accionistas de estas compañías durante la primera quincena de abril.
Un editorial del diario PUBLICO de Madrid se preguntó si el desarrollo de las vacunas ha sido posible gracias al apoyo económico público, ¿por qué se prioriza el beneficio económico a la salud de todos?.
Las vacunas de Moderna y Pfizer se están convirtiendo en los productos farmacéuticos más vendidos. Además, sus vacunas son las más caras, oscilan entre los 11.22 y 61.52 euros por vacunación completa. Por otro lado, ambas empresas tienen previsto aumentar los precios.
La economía mundial sufre un gran parón debido a la desigualdad y al lento reparto de las vacunas. Esta crisis ha hecho posible la creación de una nueva ola de multimillonarios. El fundador de BioNTech, Ugur Sahin, acumula una fortuna de 5,9 mil millones de dólares, mientras que el director ejecutivo de Moderna, Stephane Bancel, de 5,2 mil millones de dólares. Según las informaciones publicadas, Bancel ha cobrado más de 142 millones de dólares en acciones de Moderna desde que comenzó la pandemia. Por otro lado, la Cámara de Comercio Internacional proyecta una pérdida del PIB de nueve billones de dólares, en el peor de los casos.
Una de cada cuatro personas se ha vacunado en los países ricos, mientras que solo una de cada 500 lo ha hecho en los países más pobres.

PREMIOS NOBEL Y EX JEFES DE GOBIERNO PIDEN SUSPENDER LAS PATENTES
Recientemente, 175 personalidades, exjefes de estado y ganadores de Premio Nobel, incluidos Gordon Brown, Ellen Johnson Sirleaf, Françoise Hollande y Jose Luis Rodríguez Zapatero, escribieron al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en apoyo a la suspensión temporal de los derechos de propiedad intelectual de las vacunas covid-19 para permitir un aumento rápido de la producción en todo el mundo. Estos apoyos se suman a los del millón y medio de personas en Europa, Estados Unidos y otros países que piden acceso equitativo a las vacunas para todo el mundo y no solo para los países ricos.
Desde hace meses, numerosas organizaciones internacionales están apoyando la supresión de las patentes de las vacunas para solucionar la falta de vacunas, pero la iniciativa que haría esto posible en la Organización Mundial del Comercio (OMC) está bloqueada por los países ricos.
Más de 100 países de ingresos bajos y medios, liderados por India y Sudáfrica, están pidiendo a la Organización Mundial del Comercio (OMC) una exención de los derechos de propiedad intelectual de las tecnologías para la covid-19 mientras dure la pandemia, una medida a la que se han opuesto hasta ahora Estados Unidos, la Unión Europea y otras naciones ricas. Las principales empresas farmacéuticas se oponen ferozmente a compartir de forma abierta la tecnología y a la suspensión temporal de la propiedad intelectual.
Albert Bourla, director ejecutivo de Pfizer respondió a la iniciativa de la OMS de compartir la tecnología de las vacunas y permitir así que otros productores cualificados pudieran fabricar más dosis afirmando que era "una tontería" y que también "es peligroso".
Maaza Seyoum, de la Alianza de Vacunas de los Pueblos en África, recuerda que los grandes negocios "no acabarán con esta pandemia".
"Esto está más claro ahora que nunca. El presidente Biden tiene una oportunidad histórica para demostrar que antepondrá la salud y la prosperidad económica de toda la humanidad a las ganancias privadas de algunas corporaciones", defiende Seyoum. Ocho meses. Ese es el tiempo que, según los expertos, se tardaría en vacunar a toda la población del mundo si se liberaran las vacunas.